Comparación de diferentes niveles de paja de trigo como absorbente de melaza en silos de alfalfa

Abstract

Siendo la alfalfa uno de los principales forrajes que se cultiva en México y tomando en cuenta que pocas áreas del país están dotadas de clima, suelo y precipitación que sustenta la producción vegetal durante todo el afio, es necesario que se utilicen sistemas mejorados para la recolección o cosecha, conservación y almacenamiento de materias vegetales como el ensilaje para así poder suministrar al ganado alimento durante las temporadas de limitado desarrollo vegetativo. El suministro de cantidades adecuadas de los nutrientes esenciales para los animales, durante todas las estaciones del año, es indispensable para una eficiente producción ganadera. El notable incremento que se ha presentado en el país en áreas cultivadas con alfalfa durante los últimos dos años es notorio, ya que en 1976 se sembraron 126,200 Has. con una producción de 7'675,500 toneladas y en la actualidad se siembran 193,280 Has. con una producción de 20'453,600 toneladas. Probablemente los motivos que han ocasionado este cambio son: Por un lado, el aumento en la población de ganado mayor y menor y por el otro, este cultivo le represente al productor múltiples ventajas, corno son sus altas cualidades nutricionales, facilidad de manejo se le puede utilizar en verde, ensilado, henificado, como harina y en mezclas con otros cultivos, aparte de ser ideal como cultivo dentro de los programas de rotación y con precios altamente remunerativos. Entre otras cualidades que no se deben dejar pasar por alto están la gran amplitud de adaptación que presenta a las condiciones climáticas y edáficas, así como la gran riqueza que aporta al suelo cuando se cambia de cultivo. Los suplementos proteicos de origen animal son más caros que las proteínas de origen vegetal y como los bovinos no requieren de proteína de alta calidad, la fuente más barata de nutrientes para los animales es la proteína de origen vegetal que aportan los forrajes y los pastos, pero el depender de ellos solamente invita a los peligros relacionados a elementos tales como lluvias, sequías, heladas, etc. Además, ha aumentado el interés por incluir en los programas de forrajes a los ensilajes, por las siguientes razones: El empleo de los ensilajes hace posible el sostenimiento de mayor número de cabezas de ganado en una cierta extensión de terreno; en los lugares donde es difícil curar el heno y las pérdidas por curación son altas, el ensilaje ofrece un método para evitar estos problemas. La alimentación a base de ensilaje es más fácil de automatizar y de incorporar a un programa de ración completa que la alimentación con heno y nos ofrece el potencial de maximizar la producción de nutrientes por hectárea. Sin embargo, la práctica de conservación por medio del ensilaje no es muy común, especialmente para leguminosas. Este trabajo se diseñó con el propósito de probar la paja de trigo molida como absorbente de melaza en el ensilaje de alfalfa.