Programa PROCAMPO en el primer año de su implementación en el estado de Baja California Sur

Abstract

Para responder al problema de baja rentabilidad en el campo, atacar la pobreza y adecuar los sistemas de apoyo a la nueva realidad económica del país, el Presidente Lic. Carlos Salinas de Gortari, ha puesto en marcha varios programas de apoyo al campo. los programas más recientes son: El anunciado en la Cd. de México, D. F., el 14 de noviembre de 1991 denominado "Diez puntos para la reactivación y la justicia en el campo", cuyo objetivo fundamental era la reforma al artículo 27 constitucional, para otorgar mayor certidumbre y libertad a los campesinos sobre la tenencia de la tierra, elevando a rango constitucional las formas de propiedad ejidal y comunal; establecimiento de los Tribunales Agrarios, culminación del reparto agrario y permitiendo la asociación en participación de los campesinos, entre otras acciones, cuyo decreto fue publicado en el Diario Oficial de la Federación el 7 de noviembre de 1991. Otro programa fue el dado a conocer ante las organizaciones campesinas del país el 24 de febrero de 1993, llamado "Seis puntos para la modernización y capitalización del campo" (programa de apoyos al campo), el cual consistió básicamente en incrementar los apoyos en cuanto a financiamiento, inversión en el sector rural a través de FOCIR (Fondo de Inversión y Capitalización del Sector Rural), apoyos para riego par bombeo, precios de garantía e insumos para bajar los costos de producción y creación de una ventanilla única para programas de capacitación, investigación y cambio tecnológico, cuyas demandas habían sido reiteradas por los campesinos de México. El 4 de octubre de 1993, se puso en operación un programa que pretende sustituir gradualmente el apoyo tradicional otorgado a través de los precios de garantía por otro sistema de apoyo directo a las superficies sembradas con los granos y oleaginosas de mayor interés para la economía del país, y al que se le ha denominado "PROCAMPO vamos al grano para progresar". Lo esencial de este programa estriba en que la producción de granos tendrá precios de mercado referenciados a los precios del libre mercado internacional; por lo que la posible pérdida de ingreso de los productores se compensara mediante un pago directo por hectárea producida, tanto a productores comerciales como a los de autoconsumo. Esto significa que PROCAMPO asegura pago directo durante quince años, es decir hasta el año 2008, como lo establece el decreto presidencial, publicado en el Diario Oficial de la federación del 25 de Julio de 1994, mediante el cual se formaliza el apoyo a los productores de cultivos básicos. En el periodo transitorio se consideran los cultivos siguientes: maíz, frijol, trigo, sorgo, arroz, algodón, soya, cebada y cártamo. Este programa ha sido puesto en marcha en el ciclo otoño-invierno 1993/94 y ha continuado durante el ciclo primavera-verano 1994, el cual ha sido denominado coma periodo transitorio, toda vez que a partir del ciclo 1995/96, iniciara el periodo definitivo. El monto presupuestal para el periodo 1993-1994 en el estado de Baja California Sur, es del orden de 12 millones de nuevos pesos. La agricultura actual en el estado se ha caracterizado por una creciente descapitalización y tasas de crecimiento negativas, motivadas principalmente por la caída de los precios reales de los productos, por la contracción de los recursos crediticios canalizados a esta actividad, altos costos de producción y problemas de comercialización entre otros. En Baja California Sur, la estructura productiva se ha orientado a la producción de cultivos básicos, cultivos industriales y últimamente, aunque a baja escala a cultivos de exportación entre los que destacan los del tipo hortofrutícola. Por otra parte, el 70% de los productores agrícolas explotan superficies promedio de 6.0 hectáreas o menos, destinando una buena parte de la producción al autoconsumo. Esta situación ha motivado que la actividad agropecuaria de la entidad, se haya visto afectada por una marcada descapitalización de los productores que no ha permitido en gran medida incursionar en la producción de cultivos que ofrezcan mayor rentabilidad económica por metro cúbico de agua utilizado, aunado a la poca disponibilidad de financiamiento y restricciones en línea de crédito debido principalmente al problema de carteras vencidas. El programa PROCAMPO, puede significar una alternativa de reconversión de las actividades agropecuarias y de capitalización del medio rural, toda vez que permitirá a corto plazo la revaloración del agua y la tierra y un ingreso adicional por hectárea cultivada, aprovechando integralmente las ventajas comparativas y competitivas en producción de cultivos de mayor valor económico y menor consumo de agua con relación a otras entidades productoras del país.